El estreñimiento es la ausencia o dificultad para expulsar deposiciones. Esto sucede por varios motivos, ente los que se encuentra:
- El tránsito intestinal lento
- La falta de fibra en su alimentación
- Una hidratación insuficiente
Para reconocer si tu pequeño tiene este problema, notarás que:
- Se siente irritable
- Está incómodo acotado boca abajo
- Tiene el vientre inflamado
- Llora antes y/o durante las evacuaciones
- Hace bolitas de popó
- Su popó se ve seca o dura
Un cambio en su dieta, puede ayudar a que se resuelva este problema, procura:
- Incluir frutas y verduras a su alimentación diaria. Puedes ofrecerle: manzanas con cáscara, brócoli, zanahoria, plátano, calabaza, ciruela pasa, papaya, etcétera.
- La fibra contenida en el arroz integral y la avena, puede ayudarle a mejorar el tránsito intestinal.
- Ofrecerle diversos líquidos, puede ser agua simple, jugo, té, o leche materna.
Tips adicionales:
- Un masaje en la pancita puede estimular su tránsito intestinal; para saber cómo hacerlo, consulta: Masaje infantil para mejorar la digestión
- La actividad física como gatear o intentar desplazarse por sí mismo, puede ayudar a que su propio organismo tenga movilidad y mejore su digestión.
Si las molestias persisten, consulta a su profesional de la salud para que te oriente al respecto.