DHA: un gran aliado durante el embarazo

Con los beneficios del DHA contribuyes al desarrollo óptimo y saludable de tu bebé durante el embarazo.

El adecuado desarrollo de un bebé, junto con la salud de la madre, son lo más importante cuando se habla de un embarazo. Por ello, la prioridad en su cuidado y alimentación son algo fundamental. 

En ese orden de ideas, cada vez es más frecuente descubrir beneficios al momento de consumir diferentes alimentos, con lo que podemos aprovechar al máximo sus componentes. Esto cobra mayor importancia aún durante el periodo de gestación, para garantizar el bienestar integral, tanto de la madre, como del bebé por nacer, y por ese motivo, hoy lo traemos a ti para que lo tengas en cuenta.  

En épocas recientes, escuchamos con mayor frecuencia de diferentes y variados ingredientes, así como de elementos esenciales durante el embarazo y la primera etapa de la vida. Uno de ellos, y que es mencionado con un énfasis especial, es el DHA, pero: ¿Qué es y por qué es tan importante? Acá te contamos.

DHA: De origen externo, pero con beneficios internos

Para empezar, esta sigla se refiere al ácido docosahexaenoico (DHA), y es un elemento graso tipo Omega 3, esencial para que tu organismo tenga un óptimo funcionamiento neurológico e inmunológico; no obstante, nuestro cuerpo no lo produce, sólo es posible obtenerlo por medio de la ingesta de alimentos ricos en él, o bien, con ayuda de algún suplemento alimenticio. 

¿Por qué es importante en la dieta?

Su ingesta durante el primer trimestre del embarazo es clave, ya que el compuesto graso del DHA aporta a la correcta formación y al posterior funcionamiento del cerebro del bebé, por lo que su consumo está directamente relacionado con la inteligencia, la capacidad de aprendizaje y la coordinación de los niños.  

Al ser un elemento que no genera nuestro organismo, el bebé obtiene este tipo de Omega 3 principalmente desde la placenta y, después del parto, con la lactancia. Por dicho motivo, es clave que la madre aumente la ingesta de alimentos con este nutrimento en especial durante esos periodos.

¿Cómo aumentar los niveles de DHA? 

La FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) sugiere un consumo de 200 mg de DHA diarios en mujeres embarazadas, para suplir los niveles de este compuesto. A continuación, te contamos las maneras más adecuadas para lograr el objetivo

Alimentos ricos en Omega 3

• Pescado: El pez es el proveedor por excelencia de Omega 3 para nuestra dieta. Por ejemplo, 85 g de atún en agua enlatado son iguales a 0.17 mg de DHA. Consumir 85 gde sardinas enlatadas marinadas en salsa de tomate, equivalen a 0.74 mg de DHA; y con la misma cantidad de salmón atlántico cocinado, se obtienen 1.24 mg de DHA
• Frutos secos: Consumir almendras, nueces de la India o de macadamia, ayudan a incrementar los niveles de DHA en el cuerpo, además de aportar otras vitaminas y minerales al organismo como calcio o antioxidantes.
• Aceites como el de linaza, de coco o el de canola traen consigo contenido en omega 3, ayudando a adquirir este elemento más fácilmente.
• Multivitamínicos prenatales con DHA: Al ser pensados como apoyo para la obtención de nutrientes esenciales para los bebés, una fórmula con ese compuesto ya incorporado ayudará significativamente a aumentar los niveles de este ácido graso, junto con otras vitaminas y minerales para el óptimo desarrollo del niño.

Por su parte, la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria) estableció que las fórmulas infantiles o alimentos lácteos debían considerar el ácido docosahexaenoico como un nutriente esencial para el lactante, y recomendó que contengan un mínimo de 20 mg/100 kcal. 

La misma autoridad recomienda preferir la leche materna como principal alimento en los niños lactantes y solo por recomendaciones médicas, donde no se puede practicar la lactancia materna, seleccionar alimentos lácteos enriquecidos con DHA. 

Otros beneficios del DHA

Aunque suele ser más común oír de la necesidad de consumirlo para el beneficio del bebé, en realidad un recurso como el ácido docosahexaenoico (DHA) es importante en la dieta de toda persona. Esto significa que para la madre gestante también tiene una serie de beneficios, y acá te contamos algunos de ellos.  

Beneficios para la madre

• Puede aumentar la duración del embarazo, ayudando a las madres a llegar a un término saludable y completo.
• Reduce las complicaciones durante el parto.
• Óptimo funcionamiento neurológico e inmunológico.
• Algunos estudios han demostrado que el DHA ayuda a desarrollar la memoria, habilidades motoras y capacidad de atención.
• Reduce las posibilidades de tener un parto prematuro.

Por supuesto, que la madre incremente sus niveles de Omega 3 influye directa y positivamente en su bebé, ya que como mencionamos previamente, él obtendrá este recurso vital por medio de la placenta y la leche materna. Por tal motivo, también es importante que mencionemos algunos de los beneficios que esto puede generar en el niño por nacer. 

Beneficios para el bebé

• Durante el primer trimestre, tiene lugar la formación básica inicial del niño, es decir, cerebro, corazón, pulmones, sistema nervioso, entre otros; por lo que este suplemento, apoyará el desarrollo cerebral de tu bebé.
• Ayuda a desarrollar los ojos y sistema nervioso del niño.
• Influye en el desarrollo neuronal y del cerebro.
• Está relacionado con la inteligencia, la capacidad de aprendizaje y la memoria
• Mejora su coordinación ojo-mano

De esta manera podemos observar cuán importante es contar con los niveles adecuados de vitaminas, minerales y, en este caso, de un ácido graso como el DHA, ya que con ello se garantizan no sólo las ventajas para el organismo de la madre, sino también se asegura que los bebés en gestación reciban los beneficios y recursos necesarios para tener un desarrollo en plenitud de condiciones.

Finalmente, es importante tener en cuenta que una alimentación equilibrada que incluya entre sus lineamientos de alimentos ricos en DHA, una adecuada hidratación, así como realizar ejercicios de bajo impacto, son factores que van a ayudar a que tu bebé y también tú, en tu condición de madre gestante, estén saludables.