¡Prepárate a amamantar a un recién nacido!

La naturaleza es tan sabia y maravillosa, que tu cuerpo no solo es capaz de “darle hogar” a tu bebé durante sus semanas de formación; mediante la leche materna lo estarás alimentando y protegiendo, ya que está conformada por agua, proteínas, hidratos de carbono, grasas, enzimas, vitaminas, minerales, anticuerpos, entre otros. ¡Es el alimento ideal para sus primeros meses de vida! 

Aunque tu bebé no haya nacido es un gran momento para que te informes sobre qué tipo de alimentos y bebidas debes comer y evitar si ya decidiste amamantar; así estarás lista para nutrir a tu bebé sin descuidar tu salud.

Durante la lactancia es importante que tengas suficiente hierro, calcio, zinc o vitamina B12 (entre otros); ya que después del parto, la prioridad de tu organismo será la producción de leche, por lo que podrías descompensarte si no tienes una alimentación equilibrada, una adecuada hidratación y tomas un multivitamínico prenatal.

Alimentación durante la lactancia:

• Verduras de hoja verde (como las espinacas, brócoli y berros) para tener buenos niveles de hierro
• Huevo, productos lácteos, salmón, semillas de girasol, almendras, para el calcio
• Chocolate amargo, ajo, germen de trigo o garbanzos, para el zinc
• Hígado de res, lácteos, almejas, carne de res, para la vitamina B12

Procura evitar ingesta de cerveza, ya que el alcohol pasa directamente a la leche materna y por ende, al organismo de tu bebé. Recuerda que vivimos en un país donde existen un sinfín de creencias y remedios caseros que prometen aumentar la cantidad de leche o favorecer la bajada de esta, sin embargo, debes saber que tu producción dependerá de la adecuada y constante succión de tu bebé.