Los lípidos (o grasas) también son un nutrimento esencial para el ser humano y tienen una gran importancia en el embarazo, así como los hidratos de carbono y las proteínas. Tiene diversas funciones en el cuerpo y se encuentran en una gran variedad de alimentos.
A continuación encontrarás todo lo que necesitas saber sobre los lípidos y su importancia en el embarazo.

- Los lípidos son esenciales para la formación de membranas celulares y hormonas; además de ser materiales básicos de construcción de tejidos como las proteínas.

- Son necesarios para el correcto desarrollo de la visión y del cerebro, especialmente durante el periodo prenatal.

- No existe un aumento en los requerimientos de grasas durante el embarazo, por lo que se mantienen de 20 a 35% del total de las calorías diarias, al igual que en la población en general.

- La ingesta de grasa durante el embarazo debe de ser de fuentes que provean ácidos grasos esenciales y colina, un componente muy importante de los fosfolípidos que es necesario para una función cerebral saludable.

- La colina es una hormona básica para la estructura y función del cerebro, así como de la espina dorsal. Los requerimientos durante el embarazo son de 450 miligramos al día y lo encuentras en alimentos como lácteos, hígado, huevos y cacahuates.

- Los ácidos grasos omega 3 y 6 son necesarios para la óptima formación del cerebro y de los ojos, además de que juegan un papel clave en el cuerpo como precursores de la formación de hormonas, las cuales controlan funciones importantes del cuerpo como la relajación y contracción de los vasos sanguíneos, así como algunas funciones del sistema inmune.

- La clave está en consumir una correcta proporción del omega 3 y 6. El omega 6 se obtiene fácilmente a través de una alimentación rica en carnes y aceites vegetales; sin embargo, el omega 3 siempre suele resultar insuficiente.

- La cantidad de omega 3 y 6 disponible para el bebé depende única y exclusivamente de la dieta de la madre. Los requerimientos de omega 6 son de 13 gramos al día, y omega 3 de 1.4 gramos.
Ahora que conoces la importancia de los lípidos durante esta etapa, no olvides incluir en tu alimentación un poco de aguacate, aceite de oliva, nueces, almendras y aceitunas; ya que estos alimentos te proporcionan las grasas buenas que necesitas para tener un embarazo saludable.
Cuéntanos qué tanto ha cambiado tu alimentación desde que supiste que estabas embarazada.